Consideraciones para Evaluar en una LMS

Llevo varios años trabajando en distintas LMS (Moodle, Canva, Schoology, entre otras) y si bien son capaces de hacer distintas acciones de maneras similares, me gustaría mencionar el proceso de evaluación, especialmente desde el punto de vista técnico de un gestor de plataforma y pedagógico de un profesor.

Para la implementación de instrumentos de evaluación, independiente de su modalidad (presencial, b/e-learning) implica un trabajo en primera instancia pedagógico. Es decir, debe obedecer a ciertas directrices establecidas de forma previa dentro de una institución. A nivel macro, podemos incluso mencionar aspectos relacionados con el curriculum educacional establecido a nivel país, dentro de sus programas educativos. Independiente de lo anterior, hay ciertos aspectos que permiten generar evaluaciones con distintas propiedades, entre algunas de ellas puedo destacar:

• Válida: Evalúa lo que se pretende medir.
• Oportuna: Evalúa dentro de tiempos prudentes.
• Confiable: Permite emitir juicios y retroalimentar tanto al profesor como a los estudiantes.

Hay más aspectos a considerar. La evaluación de los aprendizajes es todo un mundo aparte para los docentes, porque tiene muchos autores y literatura disponible. De hecho, es común para los profes especializarse en esta área con estudios de posgrado. No obstante, mi intención no es discutir a fondo los conceptos asociados a la evaluación de los aprendizajes, pues me gustaría entregar una visión desde el punto de vista técnico y pedagógico.

Evaluación en una LMS

El proceso de evaluación presenta una gran cantidad de ventajas si se aplica de manera correcta, en distintos niveles. No obstante, hay instancias en las cuales no funciona, pero esto se debe al enfoque que suelen forzar. De esto voy a comentar más adelante, pero por lo pronto quiero dejar en claro que el concepto de instrumento de evaluación se puede referir a cualquier prueba, cuestionario, quiz, ticket de salida, etc. que se aplique durante el proceso de enseñanza.

Flujo de Trabajo

Como diseñadores instruccionales (D.I) nuestra labor consiste en recibir un cuestionario, muchas veces, en formato word (.doc, docx) y llevarlo a plataforma. Hoy en día, lamentablemente, no hay una LMS que sea capaz de leer un cuestionario en word y luego de forma mágica aparezcan las preguntas, alternativas y respuestas correctas en la plataforma. Si embargo, hay lenguajes que podemos usar, los cuales me gustaría mostrar en otra publicación, con ejemplos prácticos, específicamente para Moodle que permiten importar preguntas desde un documento de texto.

Luego de recibir el instrumento de evaluación y hacer una revisión, dependiendo de los objetivos definidos, se puede generar un proceso de entrega y contra entrega del cuestionario. Es decir, como diseñadores instruccionales debemos hacer una revisión de los tipos de preguntas y ejercicios a realizar dentro de la evaluación y levantar alertas cuando corresponda. En ningún caso, se espera que un D.I sea experto en el contenido de la evaluación. Se puede dar el caso, pero no es lo habitual. Una vez que el instrumento de evaluación esté aprobado podemos proceder a hacer el traspaso a la plataforma.

Ventajas

Utilizar una LMS afecta no sólo un área dentro del proceso educativo. Mis comentarios se centran principalmente en aspectos pedagógicos y técnicos, los cuales he podido recoger desde la experiencia:

Pedagógico

• Proporciona una gran cantidad tipos de preguntas, que como docente puedo generar. Sin embargo, las más comunes son selección múltiple, desarrollo y verdadero y falso.
• Permite generar bancos de preguntas para luego seleccionar preguntas al azar dentro de un instrumento de evaluación, con el fin de evitar la copia. En otras palabras, puedo tener 35 preguntas a mi disposición, pero cada estudiante recibirá un set de 10 preguntas al azar.
• Si nos preocupa el que los estudiantes hagan trampa o copien a sus compañeros, podemos configurar un instrumento para que tanto las preguntas como sus alternativas sean al azar. Es decir, si se da el caso que dos o más estudiantes tengan el mismo set de preguntas (muy poco probable), sus alternativas correctas serán distintas.
• Es posible configurar una escala de apreciación, pauta de cotejo o rúbrica, la cual estará disponible durante todo el proceso que dure la evaluación. En otras palabras, cada estudiante visualizará la manera en que un trabajo será evaluado y cuando el profesor aplique las calificaciones, el estudiante podrá visualizar el instrumento con el cual fue evaluado, en conjunto con cualquier comentario entregado por el profesor.
• Las rúbricas, escalas de apreciación o pautas de cotejo se pueden reutilizar. De esta manera, la idea de tener un banco de estos instrumentos cobra sentido, en una comunidad educativa. En la mayoría de los casos las notas se calculan de manera automática. No es necesario estar sacando porcentajes o aplicando fórmulas matemáticas.
• El seguimiento es sencillo de gestionar, pues se exporta un registro de cada estudiante y curso.
• Amplía las formas de evaluación, pues no están atadas a cuestionarios de selección múltiple. Puedo incluir foros, trabajos, coevaluación, etc. De este modo, como docente soy capaz de responder a estándares actuales de evaluación.
• El proceso de corrección, dependiendo del tipo de instrumento y preguntas, se puede realizar de manera automática.

Técnico

• Existen lenguajes que permiten la creación de evaluaciones de manera fácil. Es posible implementar de modo masivo los instrumentos de evaluación en varios cursos o grupos.
• Se cuentan con sistemas que permiten organizar o categorizar tanto las preguntas, los bancos de preguntas, rúbricas, etc. Acceso a exportar la información en formato hoja de cálculo, lo cual es útil al momento de consolidar las actas de notas.
• Fomenta la entrega de retroalimentación, especialmente cuando se utilizan rúbricas.
• Es posible llevar a cabo cambios en las notas, antes, durante o después de la aplicación del instrumento de evaluación. Muy común cuando hay estudiantes que reciben alguna bonificación/penalización de décimas para una evaluación en particular.
• Si bien cuenta con estrategias para evitar la copia entre estudiantes, especialmente con cuestionarios de preguntas de selección múltiple, se pueden agregar sistemas anti-copia externos, con el fin de agregar capas de seguridad.

Principales Conflictos

Evaluar en una LMS implica un cambio de paradigma. Las formas tradicionales si bien se pueden aplicar y la plataforma responde sin inconvenientes, el principal problema lo tendrá el profesor. Dicho de otra manera, tener una prueba de 10 preguntas de desarrollo es frecuente dentro de la presencialidad. ¿Es posible llevar esto a una LMS?...Sí.

La principal dificultad la tendrá el profesor al momento de hacer la corrección de esas 10 preguntas, para 30-40 estudiantes (10 preguntas x 40 estudiantes = 400 respuestas). Vuelvo a insistir, la plataforma soporta esta carga de preguntas. Sin embargo, al momento de hacer la revisión el docente requerirá de mucho tiempo para la revisión y posible retroalimentación, porque siendo sinceros es muy probable que el docente solo haga la corrección y si entrega una retroalimentación esta será dirigida para el grupo en general y no de manera individual.

Entonces, la mayor problema de los docentes es entender y aplicar las nuevas formas de evaluación. Es decir, incorporar en su práctica pedagógica el aprendizaje basado en proyectos (no confundir con el aprendizaje basado en problemas), clase invertida, coevaluación, foros de opinión, webquest, entre otros conceptos que son propios de una sociedad caracterizada por la abundancia de la información.

Comentarios Finales

Evaluar en una LMS presenta muchas ventajas desde lo técnico pedagógico. Sin embargo, es fundamental la integración de teorías asociadas a la educación en línea, en conjunto con estrategias de evaluación que estén situadas dentro de los contextos, en los cuales se aplican. Por lo tanto, ante la utilización de una LMS, es valioso un plan de trabajo que proponga la integración de cada una de las personas que están presentes dentro de este proceso. En caso contrario y como suelo ver, muchas prácticas de la presencialidad se llevan a una LMS y si bien esta no tiene problemas en recibirla, en alguna parte del proceso se presentan problemas, los cuales deberán ser resueltos.